De los creadores del desayuno infame: “Huevos con sobrasada - Forget the Operación Bikini” (tranquilos que esta receta llegará pronto) ... llega: “Sandía Peligrosa”, la nueva amiga que os alegrará las mañanas y que os hará resurgir cual ave Fénix de vuestras resacas (si le añadís el toque final). Nivel de dificultad: #Hodor. Con que os acordéis de congelar previamente el plátano, saldréis victoriosos. ¡Arriba esas batidoras! Por cierto, con esta receta cogimos fuerzas para la entrevista que nos hicieron los de Plateselector y aprovechamos para estrenar esos hules tan chulos que nuestros amigos de OleHule nos han regalado.
  1. La noche anterior cortamos el plátano en tacos de unos 2cm y al congelador dentro de una bolsa de plástico.
  2. Despepitamos la sandía con la ayuda de una cuchara y vamos troceando para llevarla al vaso de la batidora.
  3. Calentamos un vaso de agua para infusionar el té, dejamos la bolsa de té un par de minutos y dejamos templar.
  4. Añadimos el té al vaso batidor y le damos a máxima potencia durante un par de minutos, asegurándonos que no queden grumos.
  5. Colocamos el plátano congelado en un vaso, llenamos con el jugo de sandía y té.
  6. Decoramos con menta picada.
  7. Si queremos un punto más de dulzor, añadir una cucharada de azúcar moreno.
  8. El vodka os dará un punto de vista diferente al resto de la mañana, mejor si se toma en fin de semana :D.

Ingredientes

  • 1 buena tajada de sandía
  • 1 sobre de té rojo
  • 1 plátano
  • 1 hojas de menta
  • vodka (opcional)

Utensilios

  • Cazo y colador para el té
  • Batidora de vaso o de brazo
  • Congelador

Música